El arquitecto de Alexa deja la compañía y Amazon concentra sus apuestas tecnológicas en un solo frente, con la esperanza de ganar terreno frente a OpenAI y Google.
Un cambio de rumbo con nombre propio
Amazon ha iniciado una reestructuración clave en su división de inteligencia artificial. Rohit Prasad, uno de los rostros históricos de la compañía y responsable de su grupo de AGI (inteligencia artificial general), dejará el cargo a finales de 2025. En su lugar, Peter DeSantis, veterano de Amazon Web Services (AWS), asumirá el mando de una nueva unidad que integra tres áreas hasta ahora separadas: modelos avanzados de IA, desarrollo de chips personalizados y computación cuántica.
De Alexa al futuro del silicio
Prasad se incorporó a Amazon en 2013 y fue clave en la creación de Alexa, el asistente de voz que aspiraba a revolucionar la interacción en el hogar. En los últimos años, lideró el desarrollo de los modelos de lenguaje Nova, la apuesta de Amazon por competir en el mercado de la IA generativa. Sin embargo, esos modelos han quedado rezagados respecto a los de OpenAI o Google DeepMind en las pruebas de referencia, aunque Prasad ha cuestionado abiertamente la validez de dichos benchmarks.
Una fusión estratégica
La nueva organización, bajo el liderazgo de DeSantis, buscará acelerar la integración entre la investigación en modelos de IA, el diseño de chips como Graviton o Trainium, y los esfuerzos en computación cuántica. DeSantis, con tres décadas en la compañía y experiencia en infraestructura de nube, reportará directamente al CEO Andy Jassy. El objetivo es lograr sinergias que permitan a Amazon ganar agilidad frente a sus competidores.
Datos, modelos y poder de cálculo
La estrategia de Amazon combina el desarrollo de modelos propios, como la serie Nova, con el uso de sus propios chips y capacidades en la nube. Esta autonomía vertical es uno de sus activos frente a rivales que dependen de alianzas externas o proveedores de hardware. La compañía también ha incorporado a Pieter Abbeel, investigador destacado en IA, para liderar el equipo de modelos frontera, centrado en las bases técnicas más avanzadas de la disciplina.
La percepción frente a los resultados
Aunque Amazon ha ganado tracción con algunos clientes empresariales, su posición pública en el sector sigue siendo difusa. Alexa sigue sin alcanzar las expectativas tras varios anuncios de relanzamiento. Y en un momento donde OpenAI, Meta o Google exhiben sus avances con ruido mediático, Amazon parece moverse con mayor discreción. En paralelo, han trascendido negociaciones preliminares en las que Amazon estudia una posible inversión multimillonaria en OpenAI, que incluiría el uso de sus chips Trainium y la infraestructura de AWS como parte de un posible acuerdo estratégico.
Una nueva etapa con preguntas abiertas
El movimiento deja tras de sí una etapa marcada por la voz de Alexa y por la voluntad de Amazon de construir su propio camino en la IA. Ahora, con DeSantis al frente y una estructura más unificada, la compañía busca dar un salto tecnológico que la reposicione en la carrera global por la inteligencia artificial.
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