La empresa alemana DeepL, conocida por su traductor automático, ha dado un salto importante en su capacidad tecnológica. Ahora puede traducir todo internet en solo 18 días, cuando antes necesitaba 194 días. Esto ha sido posible gracias a la instalación de un sistema avanzado de Nvidia, llamado DGX SuperPOD, que incluye chips B200 Grace Blackwell, los más potentes desarrollados por la compañía.
Velocidad sin precedentes
La mejora no es solo en volumen, sino también en velocidad: el Oxford English Dictionary se traduce ahora en 2 segundos (antes tomaba 39), y una novela como En busca del tiempo perdido, en apenas 0,09 segundos. Este rendimiento multiplica por diez la potencia de procesamiento de DeepL.
Más potencia, mejor calidad
Según Stefan Mesken, jefe científico de DeepL, el objetivo es permitir que sus equipos desarrollen modelos de traducción más avanzados. También mencionó que esta nueva infraestructura permitirá mejorar herramientas recientes como Clarify, que ayuda a afinar el contexto de las traducciones interactuando con el usuario.
Nvidia se abre a nuevos actores
Este proyecto también muestra un cambio estratégico de Nvidia. Está ampliando su base de clientes más allá de gigantes como Microsoft o Amazon. Startups como DeepL ya están usando sus chips de alto rendimiento para crear aplicaciones de inteligencia artificial más especializadas.
Lo que esto significa para el usuario
Para los usuarios, estas mejoras significan traducciones más rápidas, precisas y adaptadas al contexto. Además, posicionan a Europa como un actor cada vez más relevante en el desarrollo global de inteligencia artificial.
Abre un paréntesis en tus rutinas. Suscríbete a nuestra newsletter y ponte al día en tecnología, IA y medios de comunicación.