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Midjourney, el referente en generación de imágenes por IA, ha marcado una nueva era con el lanzamiento de V1, su primer modelo de vídeo. Disponible desde el 18 de junio, permite convertir imágenes reales o generadas por usuarios en hasta cuatro clips de aproximadamente cinco segundos, allanando el camino hacia la creación audiovisual democratizada.

V1 está disponible tanto en Discord como en la web y ofrece varias modalidades: automática (movimientos aleatorios) o manual (definidos mediante texto). Los usuarios pueden elegir entre “low motion” —ideal para movimientos sutiles— o “high motion” —que introduce cambios más drásticos, aunque con posibilidad de errores—. Además, es posible extender los clips hasta 21 segundos mediante bloques adicionales de cuatro segundos.

¿Qué hace exactamente V1?

Este nuevo modelo transforma imágenes estáticas —creadas por IA o subidas por el usuario— en videoclips breves con animación generada automáticamente. A partir de una sola imagen, V1 produce cuatro secuencias en formato 480p a 24 fps, que pueden variar en estilo según la configuración elegida. Aunque no admite entrada de texto para crear videos desde cero, sí permite modificar la animación usando descripciones. Las relaciones de aspecto se mantienen, y el resultado recuerda a tomas de cámara o escenas oníricas en movimiento, ideales para redes, conceptos visuales o contenido experimental.

Nick St. Pierre (@nickfloats), especialista en visuales generativos, tras probar el sistema destacó la calidad desde el primer uso y la consistencia de los resultados, subrayando que se trata de un modelo accesible, pero técnicamente sólido. Según su experiencia, la herramienta ofrece una alternativa efectiva para generar clips con estética cinematográfica sin necesidad de software de edición complejo.

Una visión inmersiva frente a gigantes del sector

David Holz, CEO de Midjourney, describe V1 como el primer paso hacia simulaciones tridimensionales en tiempo real, una hoja de ruta que incluye integración progresiva de modelos de imagen, vídeo y 3D para crear un sistema unificado. Esta dirección apunta a competir con plataformas como OpenAI (Sora), Runway (Gen‑4), Adobe (Firefly) y Google (Veo 3), manteniendo un enfoque comunitario frente al comercial.

Precio y accesibilidad para creadores

El plan básico arranca en 10 USD/mes (≈ 8,7 EUR) e incluye acceso a V1, donde cada clip cuesta unas ocho veces más que una imagen, pero incluye cuatro resultados por estímulo generador. Además, se está probando una cola de “video relax” ilimitado para suscriptores Pro lo que refuerza su orientación hacia artistas, ilustradores y diseñadores.

Demandas que empañan el avance

El contexto legal ensombrece el lanzamiento. Apenas días antes, Disney y Universal anunciaron una demanda en Estados Unidos acusando a Midjourney de entrenar V1 y modelos de imagen con contenido protegido sin autorización. Entre los ejemplos citados figuran personajes como Homer Simpson y Darth Vader, calificando a la plataforma de “fondo sin fondo de plagio”. Esta controversia reaviva el debate sobre la transparencia de los datos de entrenamiento y la ética en la IA.

Midjourney, por su parte, defiende su uso responsable y señala que V1 está pensado para la creatividad, no para usos publicitarios o cinematográficos masivos. Invita a la comunidad a explorar la herramienta con responsabilidad, reafirmando que este debut es solo la primera de muchas piezas en su plan hacia mundos interactivos.

Creatividad en expansión bajo presión legal

Con V1, Midjourney ofrece una herramienta potente y accesible para dar vida a imágenes, pero su futuro está condicionado por el desenlace del proceso legal y por la reacción del sector audiovisual. Si logra equilibrar innovación y propiedad intelectual, el modelo podría convertirse en un estándar para creadores. En cambio, si el litigio avanza contra la compañía, el alcance de sus ambiciones podría quedarse en un sueño inacabado.

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