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Este lunes 30 de junio empieza la 138 edición del torneo de Wimbledon, que marcará un antes y un después en la historia del tenis. Por primera vez desde su creación en 1877, el prestigioso Grand Slam británico ha eliminado por completo a los jueces de línea humanos. En su lugar, un sistema de inteligencia artificial —desarrollado por Sony a través de su filial Hawk-Eye Innovations— se encarga de señalar en tiempo real si una pelota es buena o está fuera. Esta revolución tecnológica, combinada con las soluciones de IBM watsonx, representa una transformación profunda en la forma de ver, jugar y entender el tenis.

Adiós a los jueces de línea: una decisión histórica

Wimbledon fue durante décadas un bastión de la tradición, pero este 2025 ha dado un paso sin precedentes. A partir de esta edición, ya no hay jueces de línea humanos en ninguna pista. La decisión fue anunciada oficialmente en octubre de 2024, tras varias temporadas de pruebas y evaluaciones técnicas.

El nuevo sistema utiliza 12 cámaras de alta velocidad por pista, capaces de registrar hasta 340 cuadros por segundo, para seguir el recorrido de la pelota con una precisión de ±2,6 milímetros. Estas cámaras, integradas con sensores y micrófonos, no solo identifican si la bola es buena o mala, sino que también detectan pisadas en la línea de saque, toques de red y otras infracciones. El sistema genera además los tradicionales anuncios de «out» o «fault» mediante voces sintéticas entrenadas para emular el tono humano.

Esta innovación convierte a Wimbledon en el primer Grand Slam con automatización total del arbitraje de línea, sumándose a una tendencia iniciada por el Open de Australia en 2021 y seguida por el US Open en 2022. Así, el único Grand Slam que aún conserva jueces humanos en pista es el Roland Garros.

Impacto en el ecosistema arbitral

La eliminación de los jueces de línea afecta directamente a unos 300 puestos, tradicionalmente ocupados por jueces británicos voluntarios o en formación. El All England Club ha ofrecido programas de reentrenamiento para reconvertir a parte de este personal en nuevos roles de asistencia tecnológica, aunque persisten críticas sobre el impacto a largo plazo en el desarrollo de nuevos árbitros.

Una experiencia digital para el nuevo espectador

Más allá del arbitraje, Wimbledon ha potenciado sus capacidades tecnológicas para enriquecer la experiencia de los aficionados. Gracias a la colaboración con IBM, el torneo ha desplegado una serie de herramientas basadas en inteligencia artificial que transforman cómo se consume y se analiza el tenis:

  • Match Chat: un asistente conversacional integrado en la app oficial, alimentado por IA generativa, que permite hacer preguntas en lenguaje natural y recibir estadísticas al instante. Por ejemplo: “¿Quién ha ganado más puntos con su primer saque?” o “¿Cuántos aces ha hecho Alcaraz?”.

  • Likelihood to Win: muestra la probabilidad actualizada de victoria para cada jugador, calculada en tiempo real después de cada punto. Este modelo detecta momentos de inflexión emocional y estratégicos durante el partido.

  • Catch Me Up: lanzada en 2024 y ahora optimizada, esta función genera resúmenes personalizados post-partido y previas según los intereses del usuario: jugadores favoritos, nacionalidad, idioma o resultados clave. En 2024, esta herramienta fue criticada por errores como identificar incorrectamente a Emma Raducanu como la “número 1 británica”, pero en 2025 se ha fortalecido con una supervisión editorial más rigurosa y aprendizaje automático reforzado.

Watsonx: la IA que piensa como Wimbledon

Detrás de las innovaciones de Wimbledon está Watsonx, la plataforma de inteligencia artificial de IBM. Este sistema no solo analiza estadísticas, sino que también genera resúmenes, previas y contenido automatizado en tiempo real, adaptado al estilo del torneo. Gracias a su modelo de lenguaje avanzado y su capacidad para combinar datos numéricos, texto, imágenes y video, puede detectar detalles como pausas en el juego, cambios de ropa o figuras en el palco. En resumen, Watsonx permite que todo lo que ocurre en la cancha se convierta rápidamente en información útil, visual y personalizada para los aficionados.

Tradición e innovación: una nueva era para el tenis

Wimbledon 2025 representa el equilibrio entre el respeto por una herencia deportiva única y la voluntad de liderar la transformación digital del deporte. La eliminación de jueces de línea es, sin duda, una decisión que desafía emociones y símbolos, pero que apunta a una mayor precisión y eficiencia. Paralelamente, las herramientas de análisis, interacción y personalización abren nuevas puertas para atraer a públicos más jóvenes y globales.

La pregunta ya no es si la inteligencia artificial tiene lugar en el deporte, sino cómo mantener el alma del juego mientras la tecnología redefine sus reglas. 

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