Desde Paréntesis Media hemos cubierto el festival y hablado con sus protagonistas para entender cómo la IA está transformando la creación audiovisual
El +RAIN Film Festival ha celebrado su tercera edición en Barcelona. El evento, organizado por la Universitat Pompeu Fabra en colaboración con Sónar+D, ha recibido 260 películas generadas con apoyo de inteligencia artificial, un crecimiento importante frente a las 45 de su primera convocatoria. Este incremento, como explica su codirector, Frederic Guerrero-Solé, refleja el crecimiento del interés por explorar nuevas narrativas audiovisuales en diálogo con tecnologías emergentes. El festival ha reunido proyecciones, mesas de debate y ponencias centradas en los retos creativos, éticos y legales que plantea el uso de IA en el ámbito artístico.
Frederic Guerrero-Solé, codirector del RAIN, explica que este año el enfoque ha cambiado y que ahora importa más cómo se crean las obras que el resultado final. «Nos fijamos mucho en el proceso creativo», dijo. La idea es alejarse de una visión simplificada del cine con IA —del tipo “escribo un texto y me genera un vídeo”— y entender mejor las decisiones que toman los artistas al usar estas herramientas. También destacó la apuesta del festival por la accesibilidad, con subtítulos en catalán e inglés y lengua de signos. Sobre el marco legal, reconoció que aún queda mucho por hacer en cuanto a derechos de autor.
Claudio Celis Bueno, investigador en el instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Ámsterdam, habló sobre cómo se combinan el trabajo humano y el de las máquinas, explicandolo en su ponència des de un punto de vista histórico. Para él, hay una diferencia clave entre “automatización” (cuando la IA sustituye tareas tediosas) y “aumentación” (cuando se trabaja en conjunto). Esta última es la que más le interesa. “No se trata solo de hacer lo mismo más rápido, sino de descubrir cosas nuevas”, afirmava. Cree que es importante mantener un equilibrio y decidir qué tareas puede hacer la IA y cuáles deben seguir siendo humanas.
La doctora Szilvia Ruszev, artista de medios, montadora e investigadora en colaboración Humano-IA, nos habló de enla gobernanza y la justicia en los sistemas generativos. Advirtió que los modelos actuales de IA contienen sesgos tanto en los datos como en quienes los utilizan, y que una posible vía sería desarrollar modelos más pequeños y específicos para colectivos minoritarios. “El reconocimiento es solo el primer paso. Aún falta hablar de remuneración”, explicó. Apuntó que el sistema actual no garantiza que quienes han contribuido con sus obras al entrenamiento de modelos reciban compensación, y propuso explorar soluciones como el uso de blockchain para asegurar trazabilidad. Según Ruszev, las estructuras tradicionales de copyright no se ajustan al desafío actual y se necesita “algo más inventivo y colectivo”.
El RAIN 2025 no solo ha sido un festival de cine, sino también un espacio para pensar en el futuro de la creación con IA. Un lugar donde artistas, expertos y público debaten cómo usar esta tecnología de forma justa, creativa y responsable.
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